lunes, 9 de mayo de 2011

Ejercicios de los puntos

 Al triunfo de la Revolución de Ayutla que permitió la expulsión definitiva del general Santa Anna del poder, el presidente Comonfort,  nombrado en sustitución de del general Juan Álvarez el 11 de diciembre de 1855, reunió al Congreso constituyente en la ciudad de México el día 17 de febrero de 1856, para el efecto de formular un proyecto de Constitución.
 En este proyecto estuvo a punto de nacer el derecho del trabajo. Al ponerse a discusión el artículo cuarto del proyecto de Constitución, relativo a la libertad de industria y de trabajo, llevada a cabo esta discusión por el Licenciado Ignacio López Vallarta, en su discurso puso de manifiesto los males del tiempo y habló de la necesidad de acudir en auxilio de las clases laborantes.
Pero terminó el proyecto en nada al confundir este jurista la liberta de Industria con la el de la protección  al trabajo y por lo tanto esto hizo que el Constituyente se desviara del punto a discusión y votara en contra del derecho del trabajo.
En protesta de esta decisión vino el constituyente Manuel Prieto, aclarando que era brillante el discurso del Licenciado Ignacio López Vallarta, pero hubo una mala interpretación lo que dio como consecuencia que la relación de trabajo quedara sin reglamentación; se pensó que la reglamentación del contrato de trabajo era lo mismo que imponer la prohibiciones o aranceles a la Industria y no se vio la libertad de industria podía subsistir con una legislación que fijara un mínimo de condiciones de trabajo.
Siendo las ideas de este constituyente pieza importante para el reconocimiento de la legislación de dichos derechos a nivel constitucional en 1917, establecidos en el artículo 5 y posteriormente en el artículo 123 de dicha constitución, siendo su texto el siguiente:
“Nadie puede ser obligado a prestar trabajos personales, sin la justa retribución y sin su pleno consentimiento. La ley no puede autorizar ningún contrato que tenga por objeto la pérdida o el irrevocable sacrificio de la libertad del hombre, ya sea por causa de trabajo, de educación o de voto religioso. Tampoco puede autorizar convenios en que el hombre pacte su proscripción o destierro.”

¿Por Que La Libertada De Enseñanza Fue Una Preocupación Para El Congreso Constituyente?

Pero es con el Congreso Constituyente de 1856-1857, donde se fundamenta y fortalece el derecho inalienable de la educación, al promulgarse el artículo tercero en el cual se dispuso la educación sería laica, correspondiéndole a la ley qué profesiones requerían título para su ejercicio y los requisitos de su expedición.
Con las base ideológicas de la Revolución Mexicana, el Congreso Constituyente de 1916-1917,  preciso el contenido del artículo tercero, de la siguiente manera: Habrá plena libertad de enseñanza, pero será laica y gratuita, la que se de en establecimientos oficiales de educación, lo mismo en la enseñanza primaria elemental y superior que se imparta en los mismos establecimientos. También se dispuso que ninguna corporación religiosa, ni ministro de algún culto pudieran establecer o dirigir escuelas de instrucción primaria. Asimismo se estableció que las escuelas primarias particulares sólo podrían hacerlo con apego a la vigilancia oficial.

RELACIÓN ENTRE EDUCACIÓN Y LIBERTAD

El Hombre ha nacido libre es la primera parte de la frase con que comienza el Contrato Social de Rousseau y pone de manifiesto que el hombre nace libre, pero la sociedad lo aprisiona. La historia de la civilización consiste así, de una parte, en un progreso innegable de las facultades y conocimientos humanos, como corresponde a la perfectibilidad, propia de lo humano; de otra, en una pérdida continua de la libertad e igualdad naturales, con la consiguiente degradación de la vida social y política. Asimismo plantea la educación como un medio de independencia (libertad) y de democracia.

Reforma educativa, Gomez Farias


Valentín Gómez Farías fue unos de los congresistas que intervinieron activamente en la constitución de 1824. Cuando en 1833 Antonio López de Santa Anna fue electo presidente de la República, Gómez Farías ocupó la Vicepresidencia. Santa Anna poseía una enorme ambición por el poder, en cambio, Gómez Farías tenía una sola idea: lograr que México tuviera un gobierno que respetara la libertad de los individuos y la igualdad para todos. Transcurridos pocos meses de haber ocupado la Presidencia, Santa Anna pidió permiso al Congreso para ausentarse, quedando Valentín como presidente interino.  Gómez Farías fue vicepresidente de México 5 veces, con èl tuvo lugar una reforma educativa radical legislativa.
El objetivo de la Reforma educativa era que la Educación tomara un nuevo rumbo, donde se acabara con la corporación que había formado el clero con respecto a la educación; sacar a la Iglesia y a su enseñanza teológica y tomar las riendas de la educación para mejorar el país, siendo el gobierno quien se encargara de la organización de la institución.
Con la ayuda de algunos colaboradores y, sobre todo, de su amigo José María Luis Mora, quien forma parte del comité para la enseñanza nombrado por Gómez Farías el 20 de septiembre de 1833 que posteriormente sería la Dirección General de Instrucción, que es el nuevo organismo consagrado a la enseñanza; elaboró un conjunto de leyes y decretos que en resumen contenían las siguientes ideas:
“1. Permitir la libertad de pensamiento y expresión.

2. Prohibir al clero y ejército intervenir en asuntos de política y destituir a los militares que se hubiesen pronunciado en contra del gobierno.

3. Clausurar la Universidad Pontificia, porque en ésta se concentraba un grupo contrario a las ideas de un México independiente y democrático, y reemplazarla por una Dirección de Instrucción Pública, que se encargaría de todo lo relativo a la educación de los mexicanos.

4. Para extender la educación, propuso asimismo la apertura de escuelas nocturnas para que un mayor número de jóvenes tuvieran la oportunidad de aprender y la creación de escuelas normales para maestros.

5. La desamortización de los bienes de la Iglesia” 

“Las reformas fueron revolucionarias es por eso que la universidad y la mayoría de los colegios del Distrito Federal quedaban abolidos y fueron sustituidos por 6 establecimientos, controlados por el estado y dedicados cada uno de ellos a una rama de la enseñanza. La meta educativa de Mora era crear al hombre positivo, el modelo utilitarista del individuo industrioso e ilustrado que persigue sus propios intereses y cuya máxima fidelidad, como ciudadano virtuoso, sería el estado civil” (Castillo, 1997. pp 52)
La universidad fue abolida por decreto el 21 de octubre de 1833, y los seis establecimientos nuevos se encargarían de una enseñanza diversificada y especializada en una materia, alojadas en lugares que determinaría el estado, se enseñaría la historia, la estadística y la geografía de México, la economía política y la literatura.
La opinión que tenia mora era la orientar la educación por los caminos que deben corresponder a una nación que anhela estar a la altura de su tiempo.
“El problema de México giraba en torno a la disputa del control de la educación; Mora quería oponer la libertad de enseñanza y más aun la difusión de la educación pública para las clases populares. Pero bien sabemos que existe una estrecha relación entre la educación y el gobierno es por eso que Mora establecía que el gobierno debería tener el control de la educación ya que el tipo de educación de la Iglesia y otras instituciones iba en desacuerdo al ideal positivista y liberal del Gobierno.” (http://anna-esp1.blogspot.com/2008/06/reforma-educativa-de-gmez-faras.html , 19/06/09).
“Valentín Gómez Farías junto con el Congreso actuó para dictar las leyes precursoras de la Reforma y la Constitución de 1857.
Siendo de esta manera la figura precursora de la Reforma educativa de México poniendo en práctica dos bases.- sustraer la enseñanza de las manos del clero y la independencia ideológica y económica, dándole al estado la organización y coordinación de las funciones educativas.” (Castillo, 1976.)
Dicha labor que realizo Gómez Farías se vio reflejada con el establecimiento de dos escuelas normales, una para varones y otra para mujeres, la destrucción del monopolio del clero en la educación, mejoro la condición de las clases populares con la educación elemental y superior, instalo la Comisión del Plan de Estudios que después sería la ya mencionada Dirección General de Instrucción Pública, etc.
Después de un lapso de crecimiento de 11 meses la propuesta de Gómez Farías decayó ya que le fue retirado el apoyo, por lo tanto la reforma quedo aplazada hasta la generación de Juárez. En 1834 se redactó el plan contra las reformas liberales trayendo una vez más a Santa Anna. La reforma era inexistente no logrando superar la pedagogía del lancasterianismo; el cual fue obstáculo para el desarrollo del sistema educativo. El plan lancasteriano simplemente compenso la falta de maestros en una época en que los recursos eran precarios, donde los procedimientos de enseñanza fueron rutinarios y memoristas perdurando durante 68 años de 1822 a 1890; a pesar de su metodología fue la primera institución que se preocupo por la enseñanza popular, solucionando el problema de la falta de maestros.

Finalmente la reforma tuvo repercusión en la educación superior y dio un espíritu innovador a sus generaciones, preocupándose por la instrucción y por una mejora para el país intelectual, cultura, política, laboral y nacionalmente. Intervino en la destrucción del monopolio eclesiástico y militar y dio paso a la enseñanza libre del mismo modo al laicismo y a la educación como derecho de todos.

 PROPOSITOS TENDIENTES A QUE LOS RELIGIOSOS DE AMBOS SEXOS ESTEN OBLIGADOS A MANTENER EN CADA CONVENTO UNA ESCUELA GRATUITA PARA NIÑOS POBRES.
De acuerdo con este tema el propósito de que se establecieran escuelas en los conventos y monasterios era porque se buscaba facilitar la educación gratuita para los niños pobres, ya que la adquirían rara vez, y se consideraba que las escuelas no eras suficientes con respecto al  número de niños y a las largas distancias de sus casas a ellas. Querían establecer una escuela gratuita en la que los religiosos enseñarían lo que sería la doctrina cristiana, las obligaciones respectivas de los españoles a leer y a escribir.
A las niñas se les educada aparte que a los niños, a ellas se le enseñaba labores domesticas como coser, bordar y tejer, es decir algunas maniobras mujeriles. Además se debe aclarar que se les educaba a parte porque ante la escasez de escuelas gratuitas a ellas les quedaba más lejos, así que las mantenían en lugares cercanos.
Los beneficios que obtenían los religiosos al crear escuelas en sus conventos, es que además de que para ellos tenía un carácter satisfactorio, lograban promover la doctrina cristiana. Tener la mayor cantidad de feligreses y la posibilidad de que alguno de ellos se convirtiera en sacerdote o religioso.
Podemos señalar que lo expuesto anteriormente guarda una relación con el contenido actual del artículo 3º constitucional,  ya que considero que se relaciona debido a que dentro de estos propósitos se menciona lo que son las escuelas gratuitas para niños y niñas y esto algo que se establece dentro del artículo, además de que nos menciona que la educación que se imparte debe estar regulado por el estado.
LAS ESCUELAS LANCASTERIANAS EN LA CIUDAD DE MEXICO.
Las escuelas lancasterianas fueron fundadas en 1822 por una asociación de hombres filantrópicos, con el fin de promover la educación primaria entre las clases pobres, reciben este nombre en honor de Joseph Lancaster, en la cual su técnica pedagógica era que los niños más avanzados enseñaban a los más pequeños. Utilizaban el método de enseñanza mutua o sistema lancasteriano.
Las escuelas lancasterianas recibían apoyo del gobierno y el público, y se impulso el establecimiento de escuelas de enseñanza mutua en toda la nación. Dicho de método de enseñanza mutua consistía como se menciono anteriormente en que    “un maestro podía enseñar de 200 hasta 1000 niños, con los que bajaba el costo de la educación. Los alumnos eran divididos en pequeños grupos de diez; cada grupo recibía la instrucción de un monitor o instructor, que era un niño de más edad y más capacidad, previamente preparado por el director de la escuela”. (T. Estrada,1992, pp 50-51)
Se sabe que “el sistema lancasteriano se extendió a muchas escuelas particulares y fue declarado método oficial para las escuelas gratuitas municipales. Entre 1842 y 1845, la compañía lancasteriana encabezó la Dirección General de Instrucción Pública”. (T. Estrada,1993, pp 52)
Sobre la base del sistema mutuo, desaparece el concepto de un salón para cada maestro, ya que será en un solo espacio físico, una sola sala grande, en el que todas las clases conformarán una escuela única, siendo característica inherente al método que los alumnos que se encuentran más avanzados enseñen a otros.
De acuerdo con el método cada grupo de 10 niños tenía su monitor y de acuerdo con el horario que tenían enseñaban lo que eran las lecciones de escritura, lectura, aritmética y doctrina cristiana.
“Además de los monitores que enseñaban a los niños más pequeños, había monitores generales y de orden, los monitores generales tomaban la asistencia, buscaban la razón de porque el niño había faltado, cuidaban los útiles de la enseñanza; y los monitores de orden administrativa la disciplina”.  (T. Estrada, 1992)
Una de las características de la escuela lancasteriana era que el director no debía de acuerdo con la pedagogía de Lancaster,  meterse en la instrucción, ni debía levantar la voz. Se dice que el sistema de monitores debía funcionar por sí solo. El director es un inspector que solo examina si lo que se hace se realiza con orden y si todo está en su lugar.
Otro rasgo distinto del sistema lancasteriano era que cuando los niños salían de la clase de escritura, después de haber sonado la campanita, formaban en los pasillos los grupos semicirculares, donde el monitor se paraba en el centro con un cartel o tablero y señalaba las letras, silabas y lecturas escritas en el cartel. En cuanto a la clase de escritura el método del sistema lancasteriano era el del silabeo.
Al parecer las clases dentro de las escuelas lancasterianas eran largas recibían 7 horas de clase de 8:00 a las 12:00 y de 2:00 a 5:00, “la idea clave del sistema lancasteriano fue que el niño debía ser constantemente activo. No se aburría porque siempre estaba aprendiendo algo del monitor en su pequeño grupo. Lancaster insistía en que cada niño debe tener algo que hacer a cada momento y una razón para hacerlo”. (T. Estrada,1992, pp 59).
Dentro del sistema lancasteriano los niños podían subir de nivel en el momento que ellos quisieran ya que lo que determinaba su asignación a la clase era su habilidad y no su edad.
“Fueron características de las escuelas lancasterianas el sistema de premios y castigo, esto se hacía no solo para inculcar el respeto y orden en los niños sino para asegurar que los monitores no administraran penas desmesuradas u omitieran reconocer meritos”. (T. Estrada,1992, pp 62).
Se dice que la mayoría de los niños que asistían a las escuelas lancasterianas eran niños evidentemente de clase popular. Dentro de la escuela se recomendó y se ordeno al maestro a recibir toda clases de niños son excepción, y si había alguna preferencia seria en beneficio de los muy pobre y más necesitados.

Con lo escrito anteriormente nos damos cuenta que durante el siglo XIX la educación estaba en manos de los religiosos, bajo el poder del clero, lo que se buscaba en ese entonces era desapoderar a la iglesia de la educación, y que esta estuviera bajo el orden del estado. Se buscaba que México tuviera un gobierno que respetara la libertad de los individuos y una igualdad para todos.
Considero que unas de las relaciones que se da entre las características de la educación del siglo XIX con la educación actual es en relación con el artículo 3° constitucional ya que nos establece una educación gratuita, laica y obligatoria y eso era uno de los aspectos que se trataba de lograr con la educación pasada. Comenzaron por crear escuelas que fueran para todos los niños sin ninguna excepción, a la vez también las niñas tuvieron la oportunidad de recibir educación.
Algunos de los métodos propuestos con lo que trabajaban las escuelas de aquel tiempo sobre todo las mencionada en este ensayo, las cuales eran las escuelas lancasterianas, se relacionan con la forma de enseñar actualmente; al decir esto no me refiero a que sea una educación tan estricta como lo era antes, si no que los métodos y la manera en cómo se describe que eran las clases, guardan una relación con la actual, no de igual manera pero algo similar.

La educacion elemental en la epoca colonial: maestros, practicas y escolares


Las escuelas durante la época colonial, estuvieron en manos de la iglesia y se edificaron a un lado de los templos católicos, los jesuitas, agustinos y dominicos fueron las órdenes religiosas que llegaron a la Nueva España a inicios del siglo XVI, su propósito era la evangelización de los habitantes de las indias a la religión católica y la enseñanza, así como  cómo lo había ordenado el rey de España, y para ello asignó dinero y hombres para su educación.  El pensamiento de los pedagogos españoles fue de suma importancia en la elaboración del método dialéctico de los colegios de la Compañía de Jesús.
Como en la Nueva España no existía un sistema de instrucción, se implementaron las ordenanzas , en donde se prohibía que los indígenas fueran sacerdotes y ordenaban que los párrocos hablaran la lengua indígena de cada región, también quedaban fuera los maestros de los distintos grupos étnicos hasta nueva disposición,  estaba prohibido dar cátedra todo maestro que no tuviera su cédula y solo la obtendría  presentando un examen. A las amigas no se les consideraba maestras sino cuidadoras de niñas, no podían cuidar niños,  también se les exigía presentar examen.
A pesar de la prohibición de darles educación a los indígenas algunos asistieron a la Universidad de México para estudiar filosofía, gramática latina, derecho o medicina.
Las ideas humanistas influyeron en gran medida para que a la mujer se le diera instrucción más amplia en escuelas particulares, casas o conventos.

Antes de la llegada de los españoles a nuestras tierras,  estaban asentadas diversas civilizaciones, siendo los aztecas o mexicas, la que más sobresalió, y obtuvo gran desarrollo en el campo de la astrología, la herbolaria,  la educación, la cual tenía dos escuelas, el Calmecac a donde asistían los hijos de la nobleza , ahí se les enseñaba, política, cantos religiosos, buenos modales, la escritura jeroglífica, calendario etcc., a la otra escuela que era el telpochcalli, asistían los hijos de los macehuales, gente pobre, ahí se les enseñaba la danza, el canto, y ser un buen guerrero, 
Llega la colonización española y la educación tuvo varios movimientos,  ellos a su vez tomaron la corriente Humanista Renacentista que se practicaba en los países europeos, durante los siglos XV y XVI, los cuales estaban basados en las obras de Erasmo de Rotterdam, quién era un erudito de las letras clásicas y Luis Vives (1452),  “Todos los seres humanos tienen derecho a recibir educación”,  exceptuando el sexo, clase social, etnia, capacidad intelectual; textos que  ejercieron gran influencia en la práctica  docente de esa época.
Durante la conquista española que duró  trescientos años, los primeros que llegaron fueron las ordenes de frailes franciscanos, dominicos y agustino, siendo su tarea  principal, evangelizar a los indígenas a la religión católica, también impartían clases de pintura, el catecismo con dibujos en lugar de palabras, danza, teatro y música.
En la Nueva España (1530), no existía un sistema organizado de instrucción en donde los maestros se sometieran a ella , ni había niveles educativos, hasta muchos años después se reglamentaría la instrucción elemental; el estudio de la gramática sería responsabilidad de los profesores universitarios, los particulares y las órdenes religiosas. En aquélla época se le llamó “Las primeras Letras”, lo que hoy es para nosotros la instrucción primaria.  Las  órdenes religiosas   enseñaban el latín y  la lectura, ya que escaseaban los maestros y las escuelas  y las familias no podían cubrir los gastos escolares, para poder abrir escuelas, las órdenes religiosas escribieron a la corona española solicitándole ayuda para que los indios al igual que los españoles no dejaran de recibir educación; se fundó el colegio de San Pablo, en donde NO se impartiría educación básica, sino estudios de filosofía y teología y era exclusivo para novicios agustinos, no para indígenas, ellos no podían estudiar el sacerdocio.
La Real y Pontificia Universidad de San Marcos, decana de América;  Fundada por Real Cédula del 12 de Mayo de 1551, fue la primera universidad fundada en el nuevo mundo,  inició sus actividades en 1553 en la Sala Capitular del Convento de Santo Domingo, fueron sus facultades originales: Teología, Derecho Civil, Derecho Canónico, Artes y Medicina. En su trayectoria de más de cuatro siglos ha sido el foco de los más importantes intelectuales del país y del continente. Además San Marcos fue el modelo a seguir por la mayoría de universidades fundadas posteriormente. La Real y Pontificia Universidad de San Pablo (México), fundada  por Real Cédula dada en Toro el 20 de Septiembre de 1551. Se extingue en el siglo XIX. Su sucesora histórica es la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México). 
A mediados del siglo XVII, se siguieron fundando escuelas y colegios, en algunos se les enseñaba a los indios y criollos la gramática y retórica. En el Colegio de San Nicolás se instruía a españoles e indígenas  en la lectura y escritura sin considerarse todavía como escuela de instrucción elemental, pero con un diferente nivel de estudios.
En 1601 se vuelven a implementar las ordenanzas donde quedaban fuera los maestros de grupos étnicos por tiempo indefinido, dictándose una disposición en donde se les prohibía estrictamente el ejercicio del magisterio y sin derecho a presentar examen, sin licencia y cómo requisito se pedía constancia de acreditación del examen que era obligatorio, también se les asignaban dos veedores y examinadores, la sanción que se le imponía a los maestros que ejercieran sin la cédula se les desterraba por un año de la Nueva España y debían de pagar 100 pesos. Como era muy pocos maestros españoles y mucho más mestizos  y mulatos en las siguientes ordenanzas se les exigía a los maestros tener conocimientos de lectura y escritura de distintos tipos de letras y aritmética elemental  que contemplaba la enseñanza de las cuatro reglas, operaciones con  quebrados, las reglas de tres y de compañía;  las escuelas debían instalarse a distancia No menor de dos cuadras; la multa era de 20 pesos, no era lo mismo era para las amigas que educaban niñas; no se les exigía una preparación profesional, pues su tarea era enseñar catecismo y buenos modales; se les prohibía la enseñanza de los varones aunque fueran pequeños; con respecto a  los maestros no debían dejar las clases en manos de sustitutos, ni tener tiendas de legumbres, ni de otro tipo de mercancías  dentro de las instalaciones de la escuela; la doctrina se enseñaba en las mañanas y la aritmética en las tardes. Como el que expedía las licencias era el Cabildo de la ciudad de México, y el viaje era muy extenso eso sirvió de excusa para que los maestros de las demás ciudades no cumplieran con el mandato y siguieran trabajando de forma irregular; en 1604 se da el cargo de maestro mayor,  los clérigos se negaron a presentar examen, se amparaban en el fuero eclesiástico. Las disposiciones y reglamentos quedaban en el olvido debido a la costumbre de los maestros.
En 1726 se fundó el colegio de infantes de la Catedral de México, donde se les daba clases de música a niños pobres para el servicio del clero y del altar. La escuela  más reconocida fue la de los hermanos Bethlemitas, por su carácter gratuito y la severidad de sus métodos, su propósito era asistir a los enfermos y enseñar a los ignorantes.
Durante la colonia todas las ciudades españolas contaban con instrucción, las familias tenían la opción de llevar a sus hijos a escuelas privadas atendidos por maestros y maestras particulares No así pasaba con la comunidad indígena.
Los maestros y amigas no necesitaban acreditar conocimientos especiales, recibían su licencia al llevar una solicitud al ayuntamiento de la capital; y su obligación era enseñar lectura y gramática.
Los maestros españoles llegados a la Nueva España, ya conocían las ordenanzas de trabajo, más no así con los maestros o amigas que impartían su profesión debido a la demanda de instrucción, causando conflictos, descontento y competencia entre ellos; algunos no pedían licencia al ayuntamiento, cobraran  sus clases por adelantado y en ocasiones No  cumplían con su trabajo; eso ocasionó un sinfín de fraudes y descontento en la sociedad, fundándose en cada ciudad un ayuntamiento, organismo encargado de cobras fianzas y expedir las licencias.
Las ordenanzas establecían que los aspirantes a maestros tendrían que pasar un examen ante el tribunal y acreditar el limpio linaje, los que aprobaban estaban autorizados a abrir su escuela y podrían gozar de privilegios. El ayuntamiento designaba a veedores que realizaban visitas frecuentes de inspección para asegurar que se cumplieran las ordenanzas.
En vista de que algunas maestras y escuelas No respetaban la Cédula Real, el ayuntamiento citaba a los maestros y les pedía un informe no por escrito, sino por medio de preguntas  de su vida privada y costumbres; pero aún así seguían los conflictos entre las familias y los maestros incumplidos que eran muchos. 
En 1735 se les autorizó a las amigas a educar a los menores de cinco años, pero quedaba nulo ya que deberían de pasar el examen obligatorio, los maestros pedían al ayuntamiento,  que las amigas atendieran a varones de tres a cinco años, pero manifestaban que podrían sufrir tentaciones contra la castidad de parte de las niñas.
En 1767 fueron años de gran desarrollo en las ciudades novohispanas, tanto en los aspectos  sociales, económicos y académicos aumentando el número de cátedras, aumento la población indígena como española, el aumento en la recaudación fiscal. 
El crecimiento de la ciudad de México había comenzado a ocasionar problemas en los primeros años del siglo XVIII, el número de indígena había aumentado, también la violencia, la inseguridad, la mayor parte de los vagos y criminales eran españoles sin oficio. 
A principios del siglo XVIII,  a las mujeres criollas se les exigía conservar sus tradiciones castellanas,  eran partidarios de enseñarle a leer, a dominar labores domésticas  y a tocar algún instrumento musical; y de que también aprendiera la doctrina cristiana y practicara las virtudes marianas de castidad, obediencia, laboriosidad y piedad. No fue sino  hasta finales del siglo XVIII, cuando a la mayoría de las niñas españolas o criollas, pobres o ricas tuvieron acceso a una educación formal o sistemática, ya sea en sus propias casas pagando a maestros particulares y bajo la vigilancia de sus padres, maridos o tutores.
 La idea de que se debían educar todas las mujeres, independientemente de su posición social, no surgió hasta fines del periodo colonial y fue en los conventos en donde la educación logro su avance, logrando uno de  los cambios más importantes en la actitud de la sociedad frente al sexo femenino. 

Desarrollo de la educación en la época colonial.


La educación en todo momento en toda época ha sido un tema de análisis, lo que resulta de gran utilidad ya que representa una manera de tomar todas aquellas cosas que puedan ser útiles e implantarlas en el presente, buscando con ello la mejor calidad en lo que ha esté rubro se refiere.

Con el fin de hacer una reflexión sobre el sistema educativo me he interesado en hacer un ensayo sobre el desarrollo de la educación en la época colonial.
Por tanto en el presente trabajo hablaré sobre algunos aspectos y datos sobresalientes sobre el desarrollo de la educación en la época colonial.
 Hablar de educación en la época colonial es remontarnos a los siglos XVI Y XVII, época en la que la educación estuvo en manos de órdenes de  religiosos básicamente. Considero sobre ello que esto fue una decisión acertada por parte de la corona española, pues realmente se tuvo que partir de la nada para dar forma a un pueblo que envuelto en sus creencias y costumbres requería de una verdadera transformación para salir ovantes de ese mundo tan reducido en que se encontraban inmersos nuestros indígenas.

Quiero también comentar que si bien los métodos no fueron los correctos, existieron dentro del grupo indígena prácticas que no pueden ser del todo aceptadas; como aquellas en las que en nombre de sus dioses llevaban a cabo sacrificios humanos. Por esta misma razón, además de ser educados, tenían otra necesidad, la de ser cristianizados.
       De esta manera, de buena o de mala gana, la corona asignó dinero y hombres a la educación de los indígenas durante los trescientos años de la época colonial. Su principal ayuda durante el siglo XVI fue la iglesia católica, cuyos frailes, los franciscanos, dominicos y agustinos, dirigían las parroquias de los indios, llamadas “doctrinas”, y se encargaban de la evangelización y de la enseñanza. Sostenidos principalmente por el gobierno español, las órdenes religiosas inventaron métodos novedosos para transmitir los conocimientos religiosos--- pinturas, catecismos con dibujos en vez de palabras, danza, teatro y música (métodos audiovisuales), además de enseñar las artes y oficios y fundar colegios de internados para indígenas durante el siglo XVI: los franciscanos en Tlatelolco, los jesuitas en Pátzcuaro, Tepoztlán y el colegio de San Gregorio en la ciudad de México. En 1585 el III Concilio Mexicano legisló sobre dos puntos relacionados con la educación indígena. Prohibió la ordenación de los indios como sacerdotes y mandó que los párrocos usaran la lengua indígena de cada región para la evangelización.
No puedo dejar de lado el municionar que ante estas circunstancias también se dio fuertemente el fenómeno de discriminación hacia los indígenas por parte de los conquistadores, ya que además de instruirlos y evangelizarlos también les pusieron límites en su instrucción, no se les permitía llevar una formación sacerdotal. Aunque no todo fue tan grave pues se les instruía en su lengua.
Otro estímulo para la educación indígena que se realizó en este periodo fue la cédula real de 1697, repetida en 1725, que revocó la prohibición para la ordenación sacerdotal de los indios.

Durante la época colonial los estudios menores o de "primeras letras" se impartieron en la casa del alumno con algún maestro contratado ex profeso o en escuelas de diversa índole (particulares, del clero secular y regular, del ayuntamiento o de sociedades filantrópicas en el último tercio del siglo XVIII), supervisadas en su mayoría por el cabildo civil, mediante el control que ejercía sobre el gremio de maestros. Pero, fuese en la casa o en la escuela, los niños aprendían -además de la doctrina cristiana- los rudimentos para hablar, leer y escribir en latín, entre los cuatro y diez o doce años. Al dominar estos principios podían ingresar a los colegios, instituciones donde vivían y a veces se impartían los estudios mayores o de educación superior, comenzando por los cursos de gramática, cuyo propósito era mejorar y enriquecer los conocimientos adquiridos de latín.
En aquella época las instituciones de educación superior comprendían tres niveles no siempre diferenciados: la universidad, que otorgaba grados académicos de bachiller, licenciado, maestro y doctor; los colegios mayores, que tenían facultad de impartir cátedras para el otorgamiento de grados, y los colegios menores que preparaban a los estudiantes para el ingreso a los colegios mayores o a la universidad. En la Nueva España, la Universidad de México, los colegios jesuitas y los seminarios conciliares se ocuparon en primer lugar como colegios menores y excepcionalmente fueron colegios mayores.
Por todo lo anterior concluyo que en cuestión  educativa comparando la época colonial con la de nuestros días, se han tenido grandes avances en lo que ha oportunidades se refiere, pues hoy día la apertura educativa se extiende a la gran mayoría de la población cosa que no se daba en tiempo de la colonia; sólo restaría agregar que si se tuviera la dedicación que se tenía en aquella época al ámbito educativo hoy tendríamos otros resultados en lo que ha esto compende.

La educación de los indios

Educación indígena en el siglo XVIII

Para entender la educación indígena en el siglo XVIII es importante tomar en cuenta la estructura y funciones de los “pueblos de indios” de la Nueva España. En la cédula real de 1691, el rey ordenó pagar a los maestros de escuela “de los bienes de comunidad de pueblos de los indios” y así reconoció que los pueblos representaban una forma de gobierno local y una fuente de divisas que se podría usar para las escuelas. El “pueblo de indios” era uno de tres tipos de asentamientos humanos reconocidos en la legislación. La base de la estructura política y administrativa del virreinato al nivel local consistía en las ciudades y las villas de españoles y los pueblos de indios. En el siglo XVIII había aproximadamente 70 ciudades y villas de españoles y 4 000 pueblos de indios. En las ciudades y villas había ayuntamientos o cabildos, y en los pueblos de indios, el cabildo se llamaba la “república.” El pueblo de indios era una entidad corporativa, reconocida legalmente, con gobernantes indígenas electos anualmente, donde vivían por lo menos 80 tributarios (aproximadamente 360 indígenas) y había una iglesia consagrada y una dotación de tierra comunal inalienable. Los “oficiales de república” eran el gobernador, el alcalde, el regidor, el alguacil mayor y el escribano, encargados de recolectar el tributo, supervisar las tierras de comunidad y los fondos de la caja de comunidad, administrar justicia para crímenes menores según la costumbre del pueblo, financiar y dirigir las principales fiestas religiosas, representar al pueblos legalmente y ser testigos de los testamentos de los indígenas. Cada año los “vocales” o “electores” indígenas del pueblo eligieron los oficiales de república. Los ingresos del pueblo provenían principalmente del producto de diez varas cuadradas de tierra (diez metros cuadrados) que cada tributario cultivaba y el arrendamiento de terrenos sobrantes de los bienes de comunidad. Casi todos los fondos eran gastados cada año en las ceremonias litúrgicas, comida comunal, fuegos pirotécnicos, música y flores de las festividades sacras, especialmente la del santo patrón del pueblo, Corpus Christi, Jueves Santo, y las tres pascuas: Navidad, Resurrección y Pentecostés